
La esposa de Joe Gorman, Lacey, enferma de cáncer y el seguro médico le niega un tratamiento experimental que tendría que pagar de su bolsillo, un millón y medio de dolarcitos, lo que les resulta imposible. Muchos pacientes, no solo de cáncer, mueren por estas salidas administrativas de las aseguradoras, generando, como es natural, un gran resentimiento, que puede ser explosivo. Se trata aquí de otro de esos barriles de pólvora en el que los suelen sentarse los ricos. Es el argumento de la novela corta de Cory Doctorow titulada Radicalizado, del libro de mismo título y un subítulo: “4 distopías muy actuales” (2019, disponible en epublibre.org).
Cuando le dicen que su esposa va a morir en los próximos días, Joe solo encuentra consuelo en un foro de internet, con otros que como él han perdido a un ser querido por cáncer. Pero este foro se va radicalizando, hasta el punto de pasar a la dark web y tornarse violento. Eso, en un país donde se consiguen fácilmente armas y explosivos, es motivo de alarma. Así empieza otro episodio de terrorismo doméstico en EEUU, que recuerda casos célebres como el de Unabomber.
En diciembre de 2024, como siguiendo la trama de Doctorow, fue asesinado en Manhattan el CEO de UnitedHealthCare, Brian Thompson, en Manhattan. El asesino, de chompa, huyó en bicicleta. Los ejecutivos de Wall Street (y no solo de las aseguradoras) se alarmaron seriamente. CNN informó que en las próximas horas del asesinato 70 nuevos solicitantes acudieron a una sola empresa de seguridad en busca de protección. Hay mucho cabrón que se ha hecho rico a costa de matar al pueblo, ¿no es justo que teman también por su vida?
Este asesinato sacudió EEUU como ningún otro en mucho tiempo. Cinco días después fue capturado el posible autor del delito, un joven blanco llamado Luigi Mangione, con la mochila cargada de documentos falsos, armas, y un manifiesto (micromanifiesto de 262 palabras) contra el negocio de la salud con acusaciones directas contra UnitedHealthCare. ¿Por qué no se habrá deshecho de toda esa basura incriminatoria?
Su defensa alegó que Mangione fue detenido de manera ilegal. Él se declaró inocente. De ser culpable, le espera la pena de muerte, lo que podría desatar más episodios de “terrorismo doméstico”.
Mangione ha fascinado a la opinión pública, primero por su apariencia, después porque “proviene de una familia adinerada de Maryland” (New Yorker). La víctima era la encarnación del mal moderno, la avidez por el beneficio de los capitalistas.
Brian Thompson era un ejecutivo que había aumentado las ganancias de su empresa en cinco mil millones de dólares en dos años, duplicando los rechazos de solicitudes de atención pospagada, usando un algoritmo predictivo para expulsar a los pacientes enfermos y discapacitados de Medicare en hogares de ancianos y centros de rehabilitación, negando colonoscopias, insulina, analgésicos después de una cirugía, fisioterapia…
En los casquillos de bala hallados en la escena del crimen se había rotulado “negar” “defender” y “deponer”, que son las principales estrategias jurídicas de las aseguradoras ante los reclamos de los pacientes.
¿Había leído Mangione a Doctorow? Su novela pudiera estar suscitando cosas indeseadas, o adelantándose con demasiada precisión al futuro, como sucedió con una novela de Stephen King (Rabia, 1977, firmada con seudónimo Richard Bachman), faltaría que Magnioni tuviese una copia de Radicalizado entre sus cosas, como se encontró una copia de Rabia en las cosas de varios de los asesinos escolares posteriores a dicha novela.
Entre tanto Mangione se ha vuelto un Guevara gringo. “Para algunos, es un archienemigo anticapitalista. Para otros, es un héroe popular marxista que se venga de la avaricia desenfrenada de las compañías de seguros médicos estadounidenses” (The Guardian, 15.12.24).
Lo que preocupa a todos los que todavía se preocupan, es que Mangione está siendo objeto de adoración en las redes sociales y el asesinato político se viralice, justamente, como en la novela de Cory Doctorow.
En Radicalizados, la cosa tiene un final feliz. No estamos acostumbrados a eso en la realidad.